En caso de ser capturado o asesinado, Joaquín “El Chapo” Guzmán ¿ya tiene un sucesor?
El Chapo lidera el Cártel de Sinaloa, la más grande y poderosa organización del crimen transnacional. El último ejemplar de la revista Forbes lo ubica entre los diez hombres más ricos de México, junto a otros empresarios multimillonarios.
Se dice que cuenta con un ejército de 300 guardaespaldas. Pero a pesar de toda su riqueza y poder, está constantemente huyendo de las fuerzas armadas y la policía, quienes comparten información con autoridades y fuerzas militares de EE.UU. Preocupado por evitar a las autoridades, ya no toma la mayoría de las decisiones del cártel, según sostienen algunos especialistas en seguridad y escritores sobre el crimen organizado.
“El Chapo ha dejado de ser el líder. Sabe que está en una posición muy vulnerable. Cuando alguien llama demasiado la atención, ya no es útil para la organización. Se ha convertido en una distracción", expresó Ricardo Ravelo, autor del libro “Los capos”.
¿Es El Mayo quien maneja el Cártel de Sinaloa?
“El sucesor de El Chapo ha estado manejando el negocio los últimos cuatro años. él ya no es quien toma las decisiones estratégicas de la organización", sostiene Ravelo. "El que decide ahora es Ismael ‘El Mayo’ Zambada García".
“Se rumorea que El Chapo está transfiriendo gran parte de su autoridad a El Mayo Zambada”, añadió Raúl Benítez Manaut, especialista en materia de seguridad de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El Cártel de Sinaloa es responsable de al menos el 25% del tráfico de drogas de México, y cuenta con decenas de miles de operadores, entre ellos miembros de grupos aliados del crimen organizado. Lleva adelante sus operaciones en varios estados, como Michoacán y Durango, y también en treinta países por todo el mundo, reveló el escritor.
Pero a pesar de todo su dinero y su poder, hay indicios de que las autoridades están cercando a El Chapo:
• Desde junio de 2011, once de los principales lugartenientes de El Chapo fueron capturados o asesinados.
• En febrero, el Ejército confiscó 15 toneladas métricas de metanfetaminas en una finca en Guadalajara. Si bien no se efectuaron arrestos, el volumen de la droga hallada, y el hecho de que fuera descubierta en territorio del Cártel de Sinaloa, sugieren que pertenecían a El Chapo.
• A fines de febrero, la policía federal perdió por escaso margen la posibilidad de atrapar a El Chapo en una mansión en Los Cabos, según informes publicados.
Con El Chapo dándose a la fuga constantemente, es El Mayo, uno de sus principales lugartenientes, quien toma las decisiones del cártel, según sostienen los especialistas en el tema.
El Mayo tiene más de sesenta años. Al igual que El Chapo, es de Sinaloa, de la localidad de El Álamo. Es conocido por mantener un bajo perfil, rasgo que lo ayudó a sobrevivir tres décadas en el mundo de la droga "sin ser molestado", precisó Ravelo.
Gracias a su temperamento sereno, se las ha ingeniado para distanciarse de las sangrientas disputas entre sus contemporáneos, como la guerra entre El Chapo y la organización de la droga Arellano Félix, que estalló a mediados de la década de los noventa.
El Mayo también es conocido como “Jerónimo López Landeros”, “Ismael Higuera Rentería”, “Jesús Loaza Avendano", “El M-Z”, “El Gran M” y “El Padrino” según informes publicados. De acuerdo a los especialistas, no es ostentoso, odia el derroche y ha invertido sus primeras ganancias en ganado.
El Mayo, hombre de familia
“Tengo mi esposa, cinco hijas, quince nietos y un bisnieto. Mis seis mujeres están todas aquí en las fincas. Son muchachas de las montañas, como yo. Las montañas son mi hogar, mi familia, mi protección, mi tierra, el agua que bebo. La tierra siempre es algo bueno, el cielo no lo es", manifestó El Mayo en una entrevista realizada por la revista Proceso, publicada en abril de 2010.
Asimismo expresó a la revista que el narcotráfico involucra a millones de personas. "Con respecto a los zares de la droga que están encarcelados, muertos o extraditados, sus reemplazos ya están aquí dando vueltas", precisó.
Otros lugartenientes ayudan a manejar el Cártel de Sinaloa
El Mayo es asistido en el manejo del cártel por Juan José Esparragoza Moreno, alias “El Azul”, veterano en el negocio del narcotráfico.
El Chapo fue capturado en Guatemala, en 1993. En enero de 2001 escapó de la prisión de máxima seguridad de Puente Grande, Jalisco, y volvió a liderar su cártel, consolidándolo hasta convertirse en el cártel más fuerte de México, y haciéndose famoso en el proceso.
Uno de los hijos de El Chapo, Jesús Alfredo Guzmán Salazar, alias “Alfredillo”, también ayuda a manejar el cártel, de acuerdo a informes publicados. Según se informó, estaría a cargo de cooordinar la provisión de heroína y cocaína a Estados Unidos.
Delincuente de renombre internacional
El Chapo fue capturado en Guatemala, en 1993. En enero de 2001 escapó de la prisión de máxima seguridad de Puente Grande, Jalisco. Bajo su liderazgo, el Cártel de Sinaloa se convirtió en el grupo del crimen organizado más poderoso del país, al tiempo que él cobró gran notoriedad.
Se convirtió en un símbolo del narcotráfico, del mismo modo que Osama bin Laden representaba el máximo exponente del terrorismo internacional, hasta que el grupo SEALS de la Armada estadounidesnse lo asesinara en mayo de 2011.
Pero El Chapo y los demás narcos no están motivados por motivos políticos, sostiene el escritor Malcolm Beith, autor de "El último narco", un relato de la búsqueda de El Chapo.
“Esto es diferente, es un negocio, no es terrorismo. No hay ideologías en sus mentes", sostiene Beith. "Operan como las grandes empresas internacionales. Ven un mercado, desarrollan un negocio y hacen movimientos para tomar el control de la plaza".
Si El Chapo fuese detenido o asesinado, esto podría desatar una ola de violencia, ya que sus secuaces y otros grupos del crimen organizado lucharían por el control del Cártel de Sinaloa y su territorio, añadió.
En tal caso, "no visualizo que el resultado sea la caída del Cártel del Sinaloa, pero sí puedo ver una gran ruptura que pondría su poderío en riesgo", concluyó el escritor. Tal reestructuración es parte del negocio del narcotráfico, porque los líderes narcos suelen ser asesinados o capturados, sostiene Alberto Montoya, investigador de la Universidad Iberoamericana.